Abanicos Pintados a Mano.
Asi se hizo... Arcoiris 2.
Arcoiris es un
abanico con el que he disfrutado muchísimo. Es un
abanico de baraja (sólo madera) y de tamaño pequeño (18 cm). Normalmente yo pinto la tela y además lo hago en abanicos de mayor tamaño (23 cm), que es el tamaño normal de abanico para llevar en el bolso (en un bolso normal, se entiende). Cuando te lo pasas bien haciendo un trabajo se nota, y Arcoiris me salió de un tirón y me parece superalegre. Como a una de las mitades de
Bocaditos le gustó muchísimo volví a pintarlo otra vez, y así surgió Arcoiris 2. Arcoiris 2 lleva incorporadas correcciones de algunos errores que tiene Arcoiris (es lo que tiene repetir las cosas, que en el camino se va aprendiendo). Como lo pinté con relativa tranquilidad me dió tiempo a ir sacando fotos de todo el proceso, fotos que aquí comparto para que veáis el camino.
Paso 1. El punto de partida es un abanico blanco de madera, cuyas varillas están barnizadas en el anverso y sujetas por una delgada cinta, tambien de color blanco.
Para empezar a trabajar desmonté totalmente el varillaje, y para ello comencé a quitar la cinta con mucho cuidado. Esto parece sencillo, pero hay que hacerlo con mucho cuidado porque la cinta va pegada a las varillas y cualquier tirón brusco puede ocasionar la rotura de alguna.
Este paso lleva bastante tiempo, así que hay que tomarlo con mucha calma.
Paso 2: Sigo con el desmontaje. Hay que quitar el clavillo del abanico, para que las varillas queden sueltas. Esto es sencillo: se corta con unos alicates y listo. El clavillo, una vez cortado, queda inservible, por lo que al montar el abanico hay que ponerle un clavillo nuevo.
Paso 3: Ya están las varillas liberadas. Ahora viene la parte que a mí me resulta más tediosa: el lijado. Hay que hacer un buen lijado porque de ello depende que todo lo que se haga después quede perfecto. Yo lijé las varillas por ambas caras. Como siempre con mucho cuidado para que no se rompa ninguna.
Paso 4: Ya se puede empezar a pintar. Utilicé pintura acrílica de la marca Amsterdam (no es que sea la mejor marca, pero tiene infinidad de colores y está muy bien de precio).
Paso 5: Pinté el anverso de cada una de las varillas. Dejé secar. Pinté el reverso de cada varilla del mismo color que el anverso. Dejé secar. Repetí todo el proceso para dar una segunda capa de pintura. Dejé secar. No hay que olvidar pintar los laterales de las varillas, sino quedarán del color original.
Paso 6: Barnizado. Este es otro paso delicado. La elección del barniz es muy importante en este caso concreto. Si se trata de un barniz que da un acabado "pegajoso" las varillas no abrirán ni cerrarán bien. Tengo que reconocer que aquí me la jugué, porque yo no había usado antes Mod Podge como barniz (siempre había usado Alkyl). Menos mal que me salió bien.
Barnizado de cada varilla por ambos lados. Dejar secar, al menos, 48 horas.
Paso 7: Ya están todas las varillas pintadas y barnizadas. Ahora hay que montarlas y esperar que todo quede colocado correctamente.
En Arcoiris primero coloqué el clavillo y después la cinta y no me gustó el resultado, asi que en Arcoiris 2 lo hice a la inversa (primero coloqué la cinta y después el clavillo), y salió muchisimo mejor.
La cinta debe entrar por las pequeñas ranuras de las varillas. Para ello al comienzo de la cinta puse un trozo pequeño de papel celo para que el extremo tuviera algo de rigidez y pasara por la ranura. Tambien me ayudé de un palillo de dientes y de una lima metálica para evitar que la cinta se retorciera.
Conforme metí la cinta la fuí pegando a cada varilla. Aquí no me la jugué: utilicé alkyl porque necesitaba un pegamento que no dejará manchas en la cinta.
Poquito a poco fuí metiendo la cinta y pegando. Es un trabajo lento pero agradable.
Cinta colocada.
Ahora hay que asegurar los extremos inicial y final. Pegué con pegamento y dejé secar.
Paso 8: Colocación del clavillo. Este es otro paso importante. El clavillo tiene que permitir el movimiento de las varillas (no puede estar ni muy apretado ni muy holgado). De ello depende el correcto funcionamiento del abanico.
La colocación de la argolla es cuestión de gustos. El abanico queda más mono con la argolla, pero a la hora de abanicarme a mí me molesta en la mano. En todos los sitios que he buscado el clavillo lo venden conjuntamente con la argolla.
En este caso el clavillo era demasiado largo, así que tuve que cortarlo con unos alicates a la medida que a mí me interesaba.
Para colocarlo utilicé un pegamento de dos componentes para unir metales.
Uní las varillas con una goma elástica. Coloqué la pieza que cierra sobre el clavillo.
Mezclé los componentes del pegamento y lo apliqué con un palillo de dientes en la punta del clavillo. Cuando pasó un rato largo quité la goma elástica y cerré la pieza para que se quedara pegada tambien.
Y así quedó Arcoiris 2